sábado, 5 de mayo de 2012

Estremesedor

los vientos corren, las hojas caen, las tierras crujen, los cielos se quejan, la gente camina, corre, grita, rie, llora, calla, bebe, habla, come, reza, duerme, y los sonidos de la gran ciudad se estremecen en mis oídos, me ensordecen y me muestran como el rico le roba al pobre, el proletario se mata por alimentar a su familia, el loco juzga al enfermo y el poderoso le miente a su pueblo, la iglesia se aprovecha de su estado, la verdad pierde ante la corrupción del egocentrismo, la paz se viste de batalla, el extranjero es bienvenido donde el chileno desconoce a su hermano, la ciencia le gana al corazón, y el dinero manda al espíritu. Si a cada flor le llegara sol, si a cada piedra le llegara agua, y a cada chileno un rayo de razón, la hermandad se apoderaría de nosotros y la felicidad llegaría a nuestras bocas, seríamos todos uno, un pueblo leal y contento, que camina por el solo, pero .. por el momento tapo mis oídos, cierro mis ojos y espero que ese sueño llegase algún día.